Su carrera comenzó en las galerías de Nueva York de los años 80. Andy Warhol le ofreció su primer trabajo como fotógrafo en la revista Interview, donde LaChapelle retrató las caras más famosas de la época. Pronto se encontró trabajando para algunos de los periódicos internacionales más importantes, y creando las campañas publicitarias más memorables para toda una generación. LaChapelle amplió más tarde los horizontes de su trabajo y comenzó a dirigir videos musicales, funciones teatrales en directo y documentales. En los últimos años, sus obras se han expuesto en algunas de las galerías y museos más prestigiosos del mundo.
Su capacidad para evocar escenas de realismo absoluto, utilizando colores ricos y vibrantes, hace que sus obras se reconozcan al instante y sean una fuente de citas frecuentes. Se puede decir que es el único artista fotográfico activo cuyas obras han trascendido el contexto editorial para el que nacieron, para formar parte del arte contemporáneo.