Si te gusta el café, es posible que hayas oído bastante sobre el espresso. La mayoría sabe que es la base de las bebidas que se compran en una cafetería. Sin embargo, ¿alguna vez te has preguntado por qué se llama espresso? ¿Cómo probar el espresso? Existen muchos misterios detrás de una deliciosa taza de café, y hoy vamos a descubrir algunos datos curiosos sobre esta bebida.
Primero, veamos cómo funcionan las máquinas de café espresso. Para preparar espresso, la máquina debe ser capaz de hacer pasar agua caliente a través de un disco compacto de café molido. Además, necesita bastante presión para poder preparar un café con el mejor sabor lo más rápido posible.
Ha sido de esta manera desde que se inventó la primera máquina de café espresso. Luigi Bezzera introdujo el café espresso por primera vez en Italia no mucho después de que la cultura del café espresso comenzara a expandirse por Europa. Si bien Luigi Bezzera fue uno de los primeros inventores de la máquina de café, fue el emprendedor hotelero y cafetero Angelo Moriondo quien la modernizó en Turín, en 1884.
¿Qué significa espresso? El Sr. Moriondo necesitaba preparar y servirles café a sus huéspedes lo más rápido posible. Dado que su hotel estaba justo en frente de la estación de tren de Turín, adoptó el término espresso (como los trenes más rápidos de esa época) para hacer alusión a la velocidad con que se preparaba la infusión. Preparado "expresa" y rápidamente a pedido del cliente.
Cada grano de café tiene características de sabor únicas. Los catadores o los baristas suelen describir el café en función de su intensidad. ¿A qué hace referencia la intensidad del espresso? La intensidad es una noción útil para describir cuán fuerte es el sabor y el aroma de un espresso. Este concepto suele estar acompañado por el de “cuerpo”.
Puede que sea difícil de comprender si recién estás empezando a adentrarte en la cultura del espresso o en la terminología referida al sabor del café. Tu subjetividad puede afectar el modo en que describes el sabor.
Las mezclas Arábica o Robusta son las que suelen guiar nuestra percepción. Mientras que la variedad Arábica tiene notas más dulces y suaves, en general la variedad Robusta es más intensa, por lo que es más fácil de detectar. Aun así, existen otras cualidades, como el origen del café y las variedades, que también pueden determinar su intensidad. El nivel de tueste sin dudas también tiene un rol importante en el sabor del espresso.
Cuando compras cápsulas de espresso, generalmente en el envase se indica la intensidad y las mezclas. Se suele usar una escala del 5 al 10, y en ocasiones hasta el 12, para describir la intensidad que tendrá una vez preparado. Esta escala no está relacionada con ningún estándar y depende exclusivamente del juicio de la compañía de café que lo vende. Tu paladar puede percibir algo distinto a lo que se indica en el envase. No es poco frecuente que los granos con el mismo puntaje de escala, pero de diferentes compañías, tengan diferentes intensidades.
En general, si en el envase se indica que el grano tiene un puntaje inferior a cuatro, tendrá un cuerpo liviano y un aroma delicado. El puntaje de siete es para el molido medio. Tendrá un aroma más sofisticado y un sabor más fuerte, pero no tanto. Si estás buscando un café de cuerpo intenso, elige uno con un puntaje de 10.